Tras el escándalo por corrupción y las acusaciones a funcionarios muy cercanos a él, el suizo comunicó: “Pongo mi mandato a disposición y llamo a nuevas elecciones en un congreso extraordinario”. A los 79 años, abandona el sillón tras 17 como presidente.
La olla que se destapó el jueves pasado en la previa de las elecciones presidenciales de la FIFA y que provocó el arresto de 9 funcionarios de la federación que rige el fútbol en todo el mundo está en su punto máximo de ebullición. Joseph Blatter no puede sostener los embates de las investigaciones por corrupción y lavado de dinero, y aunque todavía no hay ninguna orden de arresto para él, tomó la decisión de dejar el mandato en la FIFA.
En una conferencia de prensa inesperada, el suizo de 79 años anunció: “Pongo mi mandato a disposición y llamo a un congreso extraordinario para elegir a mi sucesor”. De este modo, el príncipe jordano Ali bin Al Hussein se transforma en el máximo candidato a presidir la FIFA, ya que obtuvo 73 votos en las últimas elecciones, incluido el apoyo de la mayoría de los países de Europa y de algunos de Sudamérica
